No quiero ir a leerte ni buscarte, quiero que me "descubran" el mejor contenido
Llevo años pensando y sosteniendo que si tuviese que empezar un proyecto online, lo haría alrededor del concepto de la agregación de contenidos y no tanto desde la creación y edición de los mismos. Si a eso añado que llevo una temporada elogiando Zite y que en los últimas semanas además me he enganchado a Prismatic (análisis en Genbeta), no tengo sino motivos en reafirmarme en que estamos en un cambio de tendencia muy claro en el consumo de contenidos, no quiero ir a leerte ni buscarte, quiero que me "descubran" el mejor contenido.
¿De dónnde venimos?
La apuesta por la agregación viene de largo en internet, más que justificada por dos aspectos consustanciales a la realidad de la web. Por un lado tenemos que se pasa de la escasez a una superabundancia de contenido, escenario para el que necesitamos herramientas nuevas que nos ayuden a filtrar y valorar el contenido frente a los mecanismos tradicionales (como la marca del medio); por otro tenemos que por el ritmo de la web la unidad de consumo pasa a ser el artículo y deja de ser la publicación. Desde hace mucho los medios tienen claro que están intermediados irremisiblemente por los buscadores, no es casual que Google siempre esté en su diana a la hora de reclamar alguien que pague. Además surgen los primeros agregadores, desde los puramente algorítmicos como Google News y Techmeme (que más adelante introduciría le edición humana como complemento para mejorar) y luego vienen los basados en el filtro de la comunidad como Digg y Menéame. Cada tipo, con sus puntos fuertes y débiles, reafirma que los medios serán intermediados por alguien más que los buscadores.
A la vez surgió el RSS y los lectores para los contenidos en ese formato, muy orientados al patrón "quiero leerlo todo de esta fuente", algo que encaja mucho con la blogosfera y la dificultad de abordar como lector su naturaleza distribuida.
¿Dónde estamos?
La adopción de estos agregadores llega a ser muy significativa, aunque desigual. Si bien Menéame se mantiene y crece en España, Digg va a la deriva mientras otros como Reddit explotan. Sin embargo, la gran competencia a Google como generador de tráfico viene de una nueva fuente insospechada, la "web social" con dos protagonistas - Facebook y Twitter - que se rebelan como lugares de intercambios de enlaces a contenidos más que significativos. Añadiría Pinterest, pero con lo que mueve fuera de Estados unidos quizás haya que ser prudente con las expectativas respecto a él.
Y digo insospechados porque, aunque ahora lo veamos muy claro, en su génesis ninguna de las dos herramientas estaban pensadas para ser un escenario de intercambio de enlaces a contenidos interesantes (de memes en el caso de Facebook). De hecho, el uso como "curator" (Dreig comenta respecto al término y su labor) en Twitter es bastante habitual y uno intenta practicarlo y aprovecharlo cuando lo hacen otros.
¿Y los RSS? Hace no demasiado escribíamos por aquí que ya no quedan "super consumidores" de información, que de cada fuente quieren leerlo todo como un apunte ante la muerte de Bloglines. Haberlos "haylos", claro, pero el sector de los lectores RSS puros está de capa caída como agregador/intermediario frente a los contenidos por dos motivos: la ausencia de modelo de negocio y el cambio en el patrón de consumo de los contenidos.
Con la mayoría de fuentes difícilmente querremos "leer todo" y cada vez estamos más abiertos a que nos seleccionen, filtren, recomienden. Es el patrón de los medios sociales, sobre todo de Twitter, donde incluso aunque sigamos a un medio y este dispare todo lo que publica con su usuario, la propia naturaleza líquida de Twitter hace sólo nos impacte en algunos casos. En Facebook es el algoritmo de su newsfeed quien nos filtra todos esos intentos de impacto.
¿Hacia dónde vamos?
Mi impresión es que la tendencia a la que hemos asistido los últimos años es el perfecto caldo de cultivo para el florecimiento de nuevos agregadores e intermediarios, lejos del "leer todo de una fuente" y muy cerca del concepto "descubreme y fíltrame el mejor contenido". Es el caso de Zite, de Prismatic, de Flipboard, cada uno con su filosofía buscando el santo grial de ofrecer lo más relevante de internet para cada usuario.
De hecho lo más interesante de estas propuestas es como intentan manejar la señal/ruido. Cuanto más conocen al usuario y qué le puede interesar (mejor filtro), menos capacidad tienen para sorprenderle con una fuente y tema (descubrimiento). Flipboard canaliza sobre todo lo que seguimos en medios sociales, Zite y Prismatic confían más en su algoritmo de recomendaciones... y de momento, para mi, van ganando como servicios para conseguir contenidos interesantes. Google por su parte perpetró Currents con el modelo viejo en mente: dadas unas fuentes, mostrar todo en un formato revista.
Mi ideal es la combinación de un Zite o Prismatic con un servicio tipo Pocket (nuevo nombre de mi adorado Read it Later). Con eso uniría la posibilidad de descubrimiento y filtrado, con las lecturas que ya sé que quiero tener disponibles más adelante (y que además son un "input" adicional para perfeccionar las recomendaciones). Sigo manteniendo, por supuesto, algunas fuentes de las que quiero leer todo, que considero "autoridades" y complemento echando un vistazo a medios generalistas (intentando evitar el muy insufrible periodismo político de declaraciones), pero el peso que tienen en mi "mix de contenidos" es mucho menor que hace varios años.
Críticas y límites o cuando descubrir no es suficiente
Por supuesto el buscador sigue teniendo un valor fundamental, aunque en algunos contextos mucho menor que hace apenas unos años: para saber un dato que necesito, bien; para buscar un buen artículo para leer, análisis de un tema en concreto o algo en tiempo real, mucho menos. Para Google esto debería ser un motivo de preocupación, menor porcentaje de la información relevante para uno llega a través de él.
Y, también por supuesto, el modelo de recomendador / descubridor tiene sus limitaciones. La primera y más importante es el peligro de reduccionismo de la realidad conocida, como le digo qué temas y fuentes me interesan, como decido seguir a unos y no a otros, puedo quedar confinado en mi burbuja de opiniones y temas en los que me encuentro cómodo. Se pierde el criterio periodístico de la "portada por relevancia informativa" en favor de la portada "en función de los intereses que has declarado".
Eso en el caso de que asumamos un servicio como Zite como única fuente informativa, algo improbable y poco recomendable. Lo habitual será un uso de varias vías, escenario en el que servidor intenta apalancarse, pero en cualquier paso apostaría a que los agregadores van a ir ganando peso. Aún así, sigo pensando que las críticas a los filtros en internet son, de momento, exageradas y alarmistas.
Los medios y generadores de contenidos tendremos que ir asumiendo este escenario, muchos lo ven como una liberación - después de todo salimos de la tiranía de un único gran redirector de tráfico - pero como toda intermediación supone también una pérdida. Una cosa sí que han aprendido este tipo de servicios, al contrario que los lectores RSS plantean modelos de negocio amigables con los productos, compartiendo ingresos en caso de que los haya. En cualquier caso, bloggers y medios cada vez necesitaremos enviar más señales de que merecemos ser recomendados... ¿me compartes con tu red social?