Patricia Conde Vs 11870: cómo no gestionar una crisis en internet
Una de las comidillas del día, la amenaza de demanda de Patricia Conde a 11870, si no retiraban contenidos subidos por una fan relativos a donde se compraba la ropa. Lo explican desde el mismo 11870, que cuelga además el burofax y detalla la historia: ellos fueron los que llamaron a Patricia Conde para enseñarle lo que había hecho esta usuaria, pensando que le iba a gustar. La respuesta de la presentadora fue enviarle a sus abogados.
No me interesa demasiado el desencadenante - si publicar donde compra la ropa una estrella de la tele resulta una "intromisión ilegítima en el derecho a la propia imagen" - pero sí que creo interesante entender como han gestionado Patricia Conde y sus abogados la situación. De hecho, su postura me parece un ejemplo de cómo no gestionar una crisis en internet:
Tratan a una fan como a un paparazzi acosador y ese es un error de partida. La página era un homenaje, si no te gusta, nada más fácil que hablar con su creadora para gestionar la situación. Siendo seguidora tuya, la predisposición a no disgustar es algo con lo que se puede contar de partida.
La estrategia del burofax sí que impacta en la imagen de Patricia Conde. Pasa del personaje divertido y chispeante al que Telecinco prohíbe usar sus imágenes a una diva irritable y distante que recurre a amenazas para cerrar la página de una fan.
El resto de actores, gana, mientras Patricia pierde. 11870 gana una visibilidad difícil de conseguir - bueno, a no ser que les demande Ramoncín - Maia, la usuaria, probablemente deje de ser tan fan pero habrá sumado una buena legión de seguidores en este sitio para compartir opiniones. La información que había sido colgada ha sido amplificada y disfrutada por miles de internautas, con la difusión en blogs y sitios sociales que ha tenido. ¿Quién es el único que pierde? Pues sí, la Conde.
En definitiva, me parece muy respetable el deseo de privacidad, el derecho a la propia imagen (aún cuando fuese para evitar que se sepa que no compra la gran mayoría de la ropa en la tienda que anuncia) y Patricia Conde me cae muy bien, pero esta situación ha sido muy mal gestionada. ¿Lo ideal? Llegar a un acuerdo con la usuaria para encauzar la web de forma que respete terrenos que se consideren privados e, incluso, buscar un uso promocional o comercial. Casi cualquier cosa antes que mandar los abogados sin intentar hablar antes por una página homenaje.