Youtube y los nuevos creadores de contenido de pago en vídeo
Ayer Google confirmó lo que se venía rumoreando, pone en marcha su programa de canales de pago en Youtube para sus "partners". Los precios estarán entre uno y ocho dólares al mes para el usuario, sin que hayan concretado como se reparten estos ingresos (en publicidad en Youtube suelen comisionar casi el 50%).
Adicionalmente hay un periodo de prueba de 14 días para decidir si uno se queda con la suscripción y está también la opción de contratarla por un año con descuento. De momento, sólo "oefrtable" para una selección de creadores en Estados Unidos, que además pueden integrarse en paquetes.
Echando un ojo a los 30 primeros canales de pago llama inmediatamente la atención que los grandes productores estén ausentes. Mucha startup y pequeño creador, variaciones sobre el "do it yourself" y actores medianos como Jim Henson FamilyTV o National Geographic Kids pero ninguno de los gigantes del audiovisual tipo Disney. Aquí los incentivos para ese tipo de compañías son más dudosos: entre los contratos de distribución y la presión de la tele por cable en Estados Unidos, sus movimientos para comercializar en internet sin intermediarios y la alta mordida que puede estar pegando Google del precio final parece lógico que no sean las primeras en empujar este movimiento de Google. ¿Necesita HBO a Youtube? A día de hoy, la gran productora daría mucho más valor a la apuesta de Google que al revés.
Por el contrario, para los pequeños creadores es una oportunidad fantástica. No necesitan audiencias millonarias sino cubrir nichos que valoren mucho trabajo, ¿estaría yo dispuesto a pagar por un canal con tutoriales de Arduino? Posiblemente sí, y los costes de producción son infinitamente menores que los de hacer Juego de Tronos. Esto encaja en el modelo "marketplace" /plataforma de Google con Youtube: que sus partners puedan vender su contenido que yo ganaré dinero con la agregación de muchas pequeñas transacciones.
La duda es si el contexto de Youtube - la gran plataforma que ha popularizado el consumo de vídeo gratuito en internet - es propicio para la transacción. Ya introdujeron hace tiempo la compra de películas en Estados Unidos, pero este caso es diferente: ¿con cuantas recetas gratis compite tu canal? ¿con cuántos dibujos animados? ¿con cuantos vídeos de modding de ordenadores? Suscribirse a un canal te aporta la fiabilidad de un determinado productos y, seguramente, una mucho mejor calidad de la "señal/ruido", evitando tener que perder mucho tiempo de búsquedas... pero vamos a ver cuántas propuestas acaban convenciendo a la gente para que pague.
En todo caso, hay algo en lo que tengo esperanza con los canales de pago de Youtube y es que de una vez haya propuestas grandes de vídeo de alta calidad que se salten las ventanas de explotación temporales y geográficas. Eso de negociar país a país los derechos de tal o cual contenido debería ser algo superado cuando apuestas por una plataforma como esta. Lo que vemos de momento no invita al optimismo, muchas de las propuestas no son contratables desde fuera de Estados Unidos perdiendo uno de los mayores valores que ofrece Youtube, su audiencia global.