SkypeIn y Skype Voicemail
Los creadores de Skype parecen apostar su fortuna a dos cartas. Por un lado la de fomentar que terceros desarrollen nuevos servicios, con políticas de cesión del código fuente de Skype a cambio de que lo desarrollado sea gratis o compartan beneficios. Así han aparecido servicios como Connectotel,que que ofrece envío de SMS a través de Skype o el Skypecasting. Lo más llamativo de esta política es que "pisa" de alguna manera la segunda carta que quieren jugar, que no es otra que la de servicios premium de pago en Skype. Los últimos en ser presentados (vía HM) han sido Skype Voicemail, que hace las veces de contestador por unos módicos 15 euros al año, y SkypeIn, la muy esperada funcionalidad para recibir llamadas a través de Skype desde telefonía convencional gracias a que se obtiene un número de teléfono válido. De momento sólo en ocho países, Dinamarca, Finlandia, Francia, Hong Kong, Noruega, Suecia, Reino Unido y los Estados Unidos por 30 euros al año.
Sin duda Skype tiene que apostar por su máxima expansión en el menor tiempo posible antes de que las grandes operadoras como Telefónica lleguen a la telefonía IP, pero a fin de cuentas necesita un modelo de negocio con ingresos y estos servicios premium con audiencias millonarias se lo pueden dar.
En realidad creo muy difícil que se pueda mantener una comunidad de desarrolladores basada en formatos cerrados, acuerdos leoninos y apuesta decidida por la no interoperabilidad. El único camino que le queda a Skype es el de abrir su protocolo de funcionamiento para que terceros puedan ofertar servicios de telefonía IP compatible con Skype. Pero mientras tanto, sigue creciendo...