Shows globales de tecnología
Estos días hemos estados en Nueva York, con invitación de Samsung para Xataka a asistir a la presentación del Galaxy S4. He dejado unas primeras impresiones del teléfono y por allí tienen además toda la información en la que - humildemente - creo que ha sido la mejor cobertura que he visto del lanzamiento.
Más allá del producto hay un aspecto a analizar y que es el concepto de show global de presentación de producto tecnológico, algo que cada vez estamos viendo más y que confluye en una macro convocatoria a la prensa mundial, la realización de un mega evento más o menos creativo y la retransmisión en directo vía streaming. Hay dos puntos en este tipo de saraos que me resultan llamativos. El primero es que cada vez más ejemplifican que Europa hace tiempo que dejó de estar en el centro del mundo y que la planificación horaria tiene dos prioridades: Asia y Estados Unidos. Los europeos tenemos que trasnochar si queremos ver en directo el nuevo Galaxy S4 o no ver pero escuchar hablar sobre la Playstation nueva.
El otro es el enfoque de comunicación que hacen las marcas de tecnología. Ayer Samsung planteó una presentación dramatizada que jugaba con el vodevil propio del sitio donde realizaba la presentación, el Radio City de Nueva York.
A mi no me gustan las presentaciones dramatizadas, al 95% de la prensa de tecnología creo que le sucede lo mismo. No creo que Samsung sea ajena a estas opiniones, más bien creo que esa parte está para otro público: los medios no tecnológicos y el público al que pueden atraer si envuelven el lanzamiento en algo más atractivo.
No sé si en este caso Samsung consiguió sus objetivos - bastante tenía yo con mi lucha a muerte con la conexión Wifi, de lo que me fijé del teatro me pareció que alguna cosa les salió bien como los niños y otras fueron un disparate como las "señores que" - pero en todo caso deberían reflexionar sobre que no hay impactos neutros.
Que un vodevil te sume puntos con un público objetivo puede suponer que te reste con otros y el día del lanzamiento de un teléfono vas a interesar - al menos de momento - a los medios, analistas y apasionados por la tecnología. Y con estos restas si sobreactuas, desvías la atención y alargas la presentación con frivolidades.
No creo que vayamos a conseguir el tipo de presentación que a uno le gusta - al grano, descripción del producto y mucho tiempo para probarlo - pero sí que entiendo que las marcas entiendan que interesar y gustar a todos los públicos a la vez no es posible.