Sexo en el teléfono móvil
¿En las videollamadas, quizás en los tonos o en las descargas de juegos? El hecho de que el usuario de telefonía móvil esté acostumbrado a pagar convierte a esta plataforma en objetivo prioritario a la hora de vender servicios y contenidos. A los ya establecidos hay que unir el cada vez más incipiente mercado porno en el teléfono móvil. Terminales con pantallas de alta calidad, capaces de reproducir vídeo con una definición aceptable e imágenes de buena calidad, y con una conexión potente (ya sea 3G o Wi-Fi) se están convirtiendo ya en la plataforma ideal para los aficionados al contenido con sexo explícito. Y es que al conjunto de características que hizo estallar el boom "xxx" en internet (privacidad, inmediatez y una oferta infinita) se le une el de la movilidad como un valor muy importante.
Y curiosamente es en Europa donde se lleva la delantera en la comercialización del sexo en el teléfono móvil (ver en AOL el artículo al respecto del New York Times), aunque aún dista de ser el rey en los celulares: los tonos de llamada tanto en volumen actual como en expectativas de aquí al 2009 le superan, al menos en Estados Unidos, ya me gustaría a mí saber cifras en los mercados europeos y latino.
Ante esto se plantea el problema del acceso de menores a estos contenidos. Ya comentamos hace tiempo la no existencia de soluciones técnicas a esto en el problema del porno en el móvil que no pasen por teléfonos diseñados ex-profeso para infantes. Aunque la operadora no ofrezca en sus menús este tipo de contenidos, nada impide a terceros ofrecerlos en sus páginas o solicitándolos mediante mensajes sms.
Casi siempre la pornografía ha ayudado más de lo que se reconoce a la implantación de nuevas tecnologías, desde un mayor uso de internet a la implantación de sistemas de televisión de pago. Con los teléfonos que se descarguen vídeos y permitan visualizarlos con calidad no creo que vaya a haber una excepción, ¿o no conocemos todos a más de uno para quien esto sería un incentivo muy interesante?