Rfid en el gimnasio
Últimamente estoy entrenando algo (bueno llevo unos meses, no es el síndrome del atleta primaveral). En mi gimnasio, como en todos los que he conocido, el plan de entrenamiento queda archivada en fichas que ellos mismo te guardan. Se convierte en rutina eso de ir a buscar la ficha al montón y repasar los ejercicios del día, amén de los pesos y series correspondientes.
Por eso me llamó la atención este post de Xataka sobre un brazalete con RFID para gimnasios. Te lo pones y las máquinas van reconociendo el entrenamiento que te corresponde, se adaptan a tu nivel y al tipo de progreso que quieres realizar.
Está muy emparentado con el concepto de "Inteligencia Ambiental" que comentan en Creative Minds. Máquinas que nos reconocen, temperaturas de habitación que cambian cuando llegamos, el volumen de la tele que se regula... pero también usos menos banales: elementos de seguridad en el automóvil que se regulan para adaptarse a nuestro físico, despensa que nos recuerda qué medicina debemos tomar, puertas con productos tóxicos que se cierran cuando llega un niño... el entorno tecnológico es capaz de personalizarse a nuestros deseos y necesidades. Claro que no vivimos sólos y esto deberá conciliarse con los intereses de todos los presentes (ríase usted de la pelea por el mando a distancia).
Pero eso queda, de momento, para el futuro. A mí lo del gimnasio me ha parecido interesante porque al tratarse de una pulsera, es posible conciliar los posibles usos útiles que pueden tener los chips RFID con la privacidad, algo que en estos temas siempre merece la pena recordar.