Outlook social con Linkedin y Facebook
Tras todo el revuelo levantado por la integración de Buzz en GMail, ahora le toca el turno de ser "socializado" a Outlook. Eso sí, la aproximación resulta basatnte diferente: no es automática sino que se exige instalar un plugin; se integran con redes de contactos ya establecidas (Linkedin ahora, Facebook y otros más adelante) en las que se han aceptado los contactos uno a uno y es de sólo lectura, no se envían datos como actualizaciones de estado desde el cliente Outlook a esos servicios de redes sociales.
La obsesión por "el estatus" como nueva forma de comunicación está topando con la productividad como límite. Traer información extra de Linkedin puede aportar valor, tener en la bandeja de entrada nuevas interrupciones a gestionar es algo que está por ver que acabe siendo aceptado en el contexto del correo electrónico. Por mucho que uno sea partidario del valor que puede aportar el modelo de comunicación de Twitter en la empresa, con sistemas como Yammer, hay un cambio de contexto cuando uno sale del cliente de correo y pasa a ese tipo de servicio.