Naciones Unidas quiere el control de Internet
La labor de la Icann como supervisora de las direcciones de Internet podría ser fuertemente tranformada de llegar a buen puerto las intenciones de Naciones Unidas, que en palabras de su secretario general Kofi Annan, tienen la intención de intervenir en el proceso por el que los estándares de la red son elaborados y las asignaciones de direcciones administradas. Para dicho proceso, dominado en la actualidad por Estados Unidos, Europa, Canadá y Japón, prefiere que esté abierto a la opinión y necesidades del resto del mundo. Este deseo de Naciones Unidas se encuentra en una fase muy inicial en la que hay diversos grupos de trabajo estudiando la cuestión, pero parece claro que hay un interés manifiesto por, como informa CNet, tener una mayor influencia en los protocolos, directivas y organizaciones que regulan Internet. Casos como el de Verisign, que a finales de año aprovechó su monopolio en los servidores raíz DNS para orientar tráfico a su sitio cuando este se dirigía a direcciones inexistentes, son presentados como indicadores de que Internet en realidad está en manos de algunas superpotencias (el caso de Verisign es más sangrante que el de Icann, mientras esta última es plurinacional, la primera es una empresa privada estadounidense con el beneplácito de su gobierno). Precisamente es la administración Bush la que se espera más se oponga a las intenciones de Naciones Unidas. Y los dirigentes de la actual Icann, por supuesto. En el otro lado de la balanza, países en vías de desarrollo como Brasil o Pakistán ya han mostrado su apoyo al cambio. El luchar contra la "brecha digital" se presenta como otro de los principales argumentos de Naciones Unidas que presenta datos como que China tiene 9 millones de direcciones IP asignadas por los 33 millones de la empresa IBM.
Un tema que irá para largo y mucho más político que técnico. En principio parece que las manos de las Naciones Unidas sólo podrían llegar hasta la ICAAN, por más que casos como el de Verisign sean preocupantes. Sea como fuere, quedan años de debates.