Me han regalado un lector de ebooks ¿y ahora qué?
Uno de los regalos estrella ha sido sin duda el lector de libros electrónicos, por lo que probablemente muchos lectores de Error 500 estarán en la misma situación que un servidor: varios amigos, conocidos y familiares con la pregunta inmediata tras abrir el paquete con el regalo, ¿Y ahora qué hago para aprovechar este lector de ebooks?. Sirva este artículo como pequeña guía con varios consejos que me han funcionado muy bien tras varios años usando este tipo de dispositivos:
Conoce tu lector de ebooks: formatos de fichero soportados y DRM
Hay varios formatos de ficheros para libros y documentos de texto. Resulta que los más populares (Word, PDF), no son los mejores para leer en un lector de libros electrónicos. Lo primero que necesitamos saber es cuáles soporta el nuestro, con especial atención a tres: EPUB, FB2 y Mobi. Son los mejores entre los más conocidos para que los libros y documentos se muestren bien en un lector, por lo que una vez anotados cuáles nos vienen bien, ya sabremos cuáles tenemos que buscar.
Esto no es todo, también es importante conocer qué sistema DRM tiene nuestro lector, que es la tecnología con la que vienen equipados para impedir la copia de libros que se compran en librerías digitales. Si nuestro lector es un Kindle, ya sabemos que su sistema es el de Amazon y que sólo podremos comprar libros a ellos, a no ser que vengan totalmente desprotegidos. Lo más habitual es que la tecnología utilizada en el resto de lectores sea la de Adobe, con la que funcionan la mayoría de tiendas independientes.
Herramientas para gestionar libros y lecturas
Casi todo el mundo sabe como organizar una biblioteca física, pero muy pocos se preocupan de mantener ordenada su biblioteca digital. Si a eso sumamos que hay un lío de formatos y que nuestro lector no los soporta todos, la solución a ambos problemas se llama Calibre: organización y búsqueda a través del título y el autor, conversión entre distintos tipos de ficheros (convierte genial a EPUB y a mobi para Kindle) y lo podemos usar para transferir los libros a nuestro lector.
Actualización 2013: en lugar de Instapaper recomiendo como mucha mejor opción Pocket
La segunda herramienta que recomiendo es Instapaper, porque no todas las lecturas en nuestro lector serán libros, muchas veces vemos artículos extensos en la web que queremos leer más adelante sin multitarea y sin multimedia. Instapaper nos ayudará a marcar estos artículos y podremos descargarlos luego todos juntos en un formato de fichero compatible con nuestro lector. Genial.
¿Cómo consigo libros para mi lector?
La mala noticia es que la oferta comercial en España es paupérrima, te va a resultar muy difícil comprar ebooks en castellano de la mano de las editoriales. Por aquí hemos hablado de la iniciativa Libranda, que hace muchas cosas pero poner fácil comprar libros no está entre ellas. Con Kindle, que tiene su propia tienda, tendremos un acceso estupendo a la oferta en inglés del mercado americano, para castellano podemos contar con Leqtor como ejemplo de tienda de libros digitales (tienen lector propio, pero sus obras se pueden leer desde cualquier dispositivo que soporte el DRM de Adobe y desde su aplicación para iPad).
Actualización 2013: Leqtor cerró por desgracia, en su lugar encontramos muchas tiendas que siguen abiertas online como Fnac, Casa del Libro, El Corte Inglés...
Claro que hay una oferta importante de descargas en internet. Mi consejo es huir de esos ficheros que circulan por ahí que anuncian "7000 libros para descargar de golpe", a no ser que te quieras pasar horas discriminando entre ficheros mal formateados, obras traducidas con muy poco cuidado y miles de libros que en realidad nunca vamos a leer. Si uno quiere descargar lo mejor es buscar algún foro de "sibaritas", donde se exija que la obra esté bien maquetada. Por aquí entrevistamos al creador de uno de ellos, Papyrefb2.net.
A disfrutar del lector de ebooks
Ya sólo queda disfrutarlo, aprovechar sus ventajas: diccionarios integrados, varios obras en un soporte ligero, búsquedas en el texto del libro... pero la mayor de ellas es, en mi opinión, no ser un tablet con multitud de opciones para mirar el correo, ver páginas web, acceder a Twitter y, en definitiva, apartarnos de eso tan placentero y necesario como es leer un buen libro.