Sin perder ni un ápice de la capacidad de desconcertar del fenómeno flash mob, este tipo de eventos comienza a extenderse con pasmosa facilidad entre puntos tan dispares y lejanos como Roma o Sao Paulo. En el centro de Roma una multitud preguntaba a otra la hora y esta le contestaba, tras algunos gags que emulaban discusiones por el tráfico o saludos colectivos entre la muchedumbre. En Sao Paulo unas cien personas se concentraron enfrete de una pantalla gigante y durante tres minutos simularon estar cambiando el canal con su mando a distancia.

Los mobs continúan extendiéndose (véase también el de Londres), incluso hay sitios que me empiezan a recopilar los próximos como hace Flocksmart. De momento no se conoce ninguno en España e Iberoamérica escasea tanto en los realizados como en los planeados, aunque probablemente sea cuestión de tiempo.

Mob de Roma: Masternewmedia Mob de Sao Paulo: Ananova