La alianza entre Tivo y NetFlix
NetFlix cierra tras su trato con Tivo lo que se prevee una exitosa estrategia para llevarse los clientes de los videoclubs a la red. NetFlix es un plataforma para el alquiler de DVDs por la red en Estados Unidos, hasta ahora permitía seleccionar la película y NetFlix te la envía a casa, asumiendo ellos los costes. Hasta ahí podríamos pensar que acarrea muchos más costes que un videoclub convencional, tanto en logística como en distribución, pero aún así mantiene una tarifa plana de 22 dólares al mes en alquiler de DVD. Tan fuerte ha sido su apuesta en el mercado estadounidense que ha obligado a entrar en el negocio de alquiler a través de Internet a competidoras como Blockbuster. Pero es ahora con su alianza con Tivo para que los clientes se descarguen las películas por este sistema cuando van a alcanzar la rentabilidad. Como cuenta ZdNet, los suscriptores de ambos servicios, Tivo y Netflix, que tengan una conexión de banda ancha se podrán descargar las películas en lugar de que se les envíen por mensajero.
De Tivo ya hemos hablado en otras ocasiones, no es más una tecnología que permite grabar el contenido de la televisión, pero a diferencia de los clásicos videos, lo hace en un disco duro que permite almacenar entre 40 y 80 horas de programación. Alrededor de esto, se han generado multitud de servicios. TiVo se contrata vía suscripción y nos permite elegir series, actores o eventos a almacenar vía menú, sin preocuparnos de cambios en la programación, retrasos, cintas y de programar en absoluto cualquier reloj.
Con este movimiento llega la era de la rentabilidad a los videoclubs por Internet. La brillante estrategia de NetFlix en este caso ha sido la de conseguir una cartera millonaria de clientes a los que ahora invita a su nuevo sistema, aliados con un líder del mercado como Tivo. De esta manera aparece lo que podríamos entender como el segundo servicio real de banda ancha, tras la telefonía IP. Como negocio, la banda ancha ofrece apenas los mismos servicios que antes pero más rápido, con la telefonía IP y la descarga de contenidos se demuestra que en nuestras casas sobra un cable (el telefónico) y que el futuro de la distribución de contenidos pasa por la red, con un importante ahorro de costes y disminución del del precio para el usuario. Ya sólo queda esperar que propuestas como esta lleguen a los mercados español y sudamericano; el crecimiento de las conexiones ADSL y por cable será el indicador de los potenciales clientes para este servicio.