Google, ese fabricante hardware
Ayer hicieron público el Chromebook Pixel con el que Google lleva su sistema Chrome Os a la gama alta. El dispositivo tiene unas características - sobre todo la pantalla - excelentes, y el precio va en consonancia, 1300 dólares, aunque no es eso lo más relevante en este caso sino que - a diferencia de otros portátiles con Chrome Os - no se han apoyado en otro fabricante.
Es un portátil "made in Google", que si bien en móviles y tablets se sigue apoyando en terceros para la gama Nexus a pesar de ser la dueña de Motorola, en portátiles ha dado un paso aparte. Como con Microsoft con Surface está el debate de si estamos ante una apuesta fuerte por virar el modelo de negocio o se trata de sacar un dispositivo que "muestre el camino" a otros a la hora de crear equipos con este sistema.
Tratándose de Chrome Os apostaría el segundo escenario, pero en estos tiempos en el que la cadena de valor se está desplazando y cada actor está intentando abarcar más, no descartaría nada en absoluto.
Y sí, el debate con este sistema operativo sigue estando en su valor añadido frente a otros (Windows, Mac Os, Linux) que lo igualan en los puntos fuertes (arranque rápido, acceso a la nube) y además permiten aprovechar mejor la potencia local con aplicaciones instaladas. Pero esto ya lo hemos hablado no una, sino dos y hasta tres veces... y seguimos viendo el mismo escenario: parece que Google sí que necesita un sistema propio, pero no aparecen los argumentos que den sentido para el usuario a la hora de comprarlo