Facebook se está llenando de memes... y esto es una muy mala noticia para Facebook
Hablar del "feeling" propio sobre como está utilizando la gente un servicio de redes sociales como Facebook tiene el enorme riesgo de que, por su propia naturaleza, uno lo ha configurado con cierto sesgo. Aún así, toda vez que uno tiene una saludable diversidad de contactos allí y que Jorge Galindo ha escrito sobre los problemas de Facebook por su naturaleza original (contactos basados en lo personal) y su uso actual (la gente no comparte lo personal sino, sobre todo, contenido externo), me animo a publicar en el mismo sentido. De hecho, yo iría incluso un paso más allá, si mezclamos información con un contexto de ocio (que es el contexto del servicio del amigo Zuckerberg, al que la gente se conecta para "desconectar") tenemos que cada vez más nuestros contactos en Facebook lo que comparten son "memes de internet". No recuerdo la última vez que me conecté a Facebook en la que mi timeline no tuviese varios elementos dignos de reddit o 9gag. No llega a ser Cuanto Cabrón, pero la tendencia hacia eso y hacia los vídeos chorra está acelerando. De hecho, me preocupan poco los filtros de Facebook para acceso a la información porque pocas cosas me parecen tan contradictorias como pretender informarse a través de Facebook. Si hace tiempo apuntábamos que en Facebook funcionaba lo emocional sobre lo racional, ahora deberíamos afirmar que es lo emocional con el agravante de "chanantismo".
¿Por qué es una mala noticia para Facebook?
Y esto es, en mi opinión, una mala noticia para Facebook porque es síntoma de que ha fracasado en compaginar un servicio basado en las relaciones personales con la vertiente orientada a los intereses, que es el giro que ha venido intentando dar en los últimos años: las páginas de empresas, productos, marcas, los "me gusta" conquistando la web... A eso sumaron empujar al usuario a compartir en abierto, relaciones asimétricas... pero Facebook sigue siendo percibido como un servicio de redes sociales para charlar con los amigos en un contexto de ocio. Y lo apropiado, en dentro de ese contexto, es compartir chorradas banales para hacer reír (o hacerme el gracioso). El resultado final es que Facebook complica su experiencia de uso, empieza a diversificar el caso de uso que quiere potenciar y, salvo el efecto red que tiene, a la postre resulta peor orientado hacia la información que Twitter, peor orientado hacia los intereses temáticos que nuevos actores del campo social como Pinterest (que está ejecutado de forma maravillosa y del que tendremos que hablar detenidamente) y, encima, ve aparecer redes como Path que buscan la función original de Facebook: compartir con los íntimos. Mala noticia para Zuckerberg y cía si esta percepción es hacia donde se dirige realmente: hay muchos más negocio en los intereses de la gente que en el último meme salido de forocoches. PS: el post resumido en un twit de hace días,
Creo que mi uso de Facebook se puede resumir en "vídeos que me averguenza poner en el blog o Twitter"
— Antonio Ortiz (@antonello) enero 19, 2012