El nuevo Hotmail, seis años después del lanzamiento de GMail
Seis años después del lanzamiento de GMail, por fin Microsoft se atrevió a renovar a fondo Hotmail en un intento de que su servicio de correo dejara de ser sinónimo de usuario que se quedó en los años 90. Por aquí hemos hablado un par de veces del "síndrome de Hotmail" (y 2): la parálisis por no modificar la experiencia de los usuarios actuales que se quejarían convertida en oportunidad para que terceros (Yahoo y GMail en este caso) sean capaces de ofrecer innovaciones para llevarse a aquellos predispuestos a lidiar con la migración y con probar cosas nuevas. Al nuevo Hotmail merece la pena echarle un vistazo. Sigue con un pie anclado en el usuario "casual" que no pasa horas en el correo (de ahí que la vista por defecto no agregue las conversaciones como GMail, aunque está disponible como opción), pero tiene opciones que servidor desearía tener disponibles: ver la bandeja de entrada sólo con correos de gente que uno tenga en la agenda (genial para el día de vuelta de las vacaciones), filtros automáticos para servicios de internet (tipo notificaciones de Facebook, Twitter) en la propia bandeja y una integración con Skydrive sencillamente genial: en lugar de enviar realmente los ficheros grandes, los sube al sistema de almacenamiento en la nube y les ofrece un enlace para descarga. En el análisis del nuevo Hotmail de Genbeta hay muchos más detalles e información, como la integración con Facebook, la versión móvil y con Office Web Apps.
Difícilmente van a recuperar a los usuarios avanzados del correo, pero creo que con nuevo Hotmail sí que ponen sobre la mesa suficientes razones para mantener a los que utilizan intensivamente servicios de redes sociales (aunque les falte integración con Tuenti). Los que "viven" en la bandeja de entrada tienen Gmail configurado y perfilado a sus necesidades desde hace años y las novedades de Hotmail son interesantes, pero insuficientes para justificar una nueva migración. Y esto no es tema baladí, porque Gmail está siendo uno de los caballos de troya para la entrada de Google en las empresas, algo que para Microsoft tiene mucho más peso que la basurilla de publicidad que agregaban a cada correo enviado con Hotmail (algo que también, por fin, han retirado).