Dooplan, cuando escalar no es una ventaja competitiva

Qué mejor que un comienzo de puente para comentar una agenda cultural y de ocio como es el caso de Dooplan. Dooplan comenzó recopilando los eventos de Barcelona y Madrid y acaba de sacar versiones para Valencia, Sevilla y Zaragoza (de Málaga de momento, nada), a lo que añade utilidades del tipo agenda personal más red social con recomendaciones. Bien resuelta y con detalles interesantes como el muro inspirado en Facebook, medición de afinidad entre usuarios "a los Last.fm" y muchas - quizás demasiadas - posibilidades de interacción. Pero lo que más me ha interesado de Dooplan es su filosofía basada en redactores y no sólo en usuarios que envían los eventos. Es una dicotomía que se plantean muchos emprendedores a la hora de montar su servicio en internet: ¿aseguro la experiencia y la calidad de los contenidos contratando editores y asumiendo ese gasto o priorizo que sean los usuarios los que puedan añadirlo, ofreciendo una plataforma que escale por si misma?. El impacto en costes es considerable, la primera opción parte de costes altos y de que añadir cada ciudad implica (de ahí que Dooplan vaya paso a paso), mientras que la segunda sacrifica control de la calidad a cambio de escalar inmediatamente y tener menos costes: cuesta menos revisar lo que han subido que buscar de forma proactiva todos los eventos de una ciudad.
En esa dicotomía, a veces no escalar puede ser una ventaja competitiva en lugar de un problema en la lucha por la fidelización de los usuarios. Si vemos que relevancia se da al "envía evento" en Dooplan (al pie) frente a opciones consolidadas como Kedin (en la cabecera), tenemos la apuesta de cada uno a la hora de gestionar una guía de ocio urbana en la red.