Blogs y problemas con la justicia
En los últimos días se han producido dos hechos que invitan a la prudencia a la hora de escribir sobre ciertos asuntos en un blog. El primero es despido de un empleado de Microsoft por poner en su bitácora fotos de cómo descargaban equipos G5 de Macintosh en una sede de la empresa de Redmon, por cierto post que no ha eliminado y se puede visitar en michaelhanscom.com. El otro es la demanda que ha sufrido un weblogger anónimo, que firma con el seudónimo Atrios, por parte del columnista conservador Paul Krugman que se sentía difamado por lo aparecido en dicho blog.
El primer caso podríamos enmarcarlo en la difícil relación entre empresa y blog personal. Parece que la medida de Microsoft es desmedida, más bien da la impresión de que quieren senter precedente sobre la difusión por parte de empleados de su funcionamiento interno. El hecho de que haya sido a través de un blog no deja de ser anécdota.
El otro puede dar más juego. Por un lado el demandante exige a BlogSpot los datos del weblogger anónimo. Ya se sabe que en general Google es muy pronta a colaborar con este tipo de iniciativas, por lo que no es de extrañar que pronto el anonimato de Atrios pase a la historia y es que para conseguir blogs realmente anónimos hay que currárselo mucho más que ponerse un nick ingenioso en BlogSpot.
Fuentes: Msnbc.com y The Register