Avalanche, alternativa de Microsoft a BitTorrent
De sorprendente cuando menos se puede calificar la noticia de que Microsoft está preparando un sistema de intercambio de ficheros basado en tecnología P2P y cuyo nombre en clave es Avalanche. El sistema está siendo desarrollado en el Reino Unido y a priori guarda algunas similitudes con el P2P de moda, BitTorrent, aunque aporta una idea que creo puede ser bastante innovadora. Se trata intentar solventar el problema que surge cuando el fichero original ha sido retirado de la red y nadie se ha terminado de bajar todos los fragmentos en que se divide. Desde Microsoft apuntan que Avalanche solucionaría esto codificando los ficheros al ser subidos al servidor de manera que a cada fragmento se le añade información sobre el resto. Con ello cada cliente no tendría necesidad de descargar cada uno de los trozos del fichero original, sino que a partir de unos cuantos podría crear por si mismo el resto. Me queda la pregunta de si consiguen esto sin "engordar" demasiado los fragmentos. (Por cierto, evitaré hacer el chiste de que Microsoft necesita un sistema P2P porque sus servidores no dan a basto con tanta descargas de parches)
¿Otras diferencias de Avalanche respecto a BitTorrent? Pues hay que apuntar otras dos nada menores (vía InfoWorld): la ausencia de trackers (aspecto en el que BitTorrent está dando pasos) y un mecanimo por el cual todo lo que se comparte viene firmado de forma inequívoca. ¿Qué significa esto? Pues que es una red de intercambio diseñada especialmente para evitar el anonimato. Este aspecto puede traer cola pues encaja en las exigencias de las discográficas y gestoras de derechos de autor en los distintos juicios que se siguen contra sistemas P2P (recordemos la victoria de Grokster y su continuación en Grokster frente al supremo) y a las que las empresas detrás del software para intercambio de ficheros siempre han contestado que en un sistema descentralizado no es posible identificar quién comparte qué. Al margen de otras consideraciones sobre la Propiedad intelectual, hay muchos casos en que el anonimato no es sólo recomendable, sino muy necesario. Si no, que se lo pregunten a todos los blogs chinos a los que Microsoft y Google, entre otros, ayudan a censurar o todos los países en los que difundir ciertas ideas equivale a caer preso.