La trampa de una internet sin publicidad
Creo que llego a tiempo para comentar lo propuesto desde La papelera como tema para el blog carnival de esta semana y que no es otro que la publicidad en internet. Mis opiniones acerca de la publicidad en los blogs ya están expuestas en "Los bloggers no somos monjes de Silos" y en "Publicidad en los feeds" por lo que poco más puedo decir de nuevo, máxime cuando coincido con la mayoría de las ideas expuestas por Mariano sobre este mismo tema.
De forma resumida entiendo que la publicidad está salvando la internet que conocemos, la del cada vez mayor acceso y la de servicios universales y gratuitos. Mensajería instanténea, correo electrónico, hospedaje de weblogs, telefonía IP, contenidos... todos generan gastos en infraestructuras y sueldos (amén del beneficio que buscan los que los desarrollan) y alguien tiene que pagar las facturas.
¿Qué en la publicidad hay prácticas despreciables, llegando al límite de la estafa? Pues sí, es cierto y contra ellas hay que luchar. De hecho con la publicidad contextual se llega a un estado en el que la publicidad se presenta lo menos molesta posible al publicitar sólo productos y servicios afines al contenido visualizado. Claro que hay excesos y que uno los rechaza, pero mayores reparos me causa la brecha digital que supondría tener un Google de pago, un correo de pago o un bitacorae de pago. Aunque siempre podemos planteárnoslo, ¿cuanto cobramos por usar un buscador? ¿y por acceder a Barrapunto?